¿Te gustan nuestras historias sobre antiguas joyerías cubanas? Pues ahora te traemos una nueva. Prepárate para conocer la historia de “La Fortuna”

La Fortuna fue una joyería de la Habana que se estableció en la calle Águila, cerca de la esquina Estrella, fue fundada en el año 1906. Esta empresa operaba bajo la razón social de Cesar González y Compañía S en C. En sus primeros 20 años mantuvo importantes volúmenes de negocios en joyería, platería, relojería y efectos dentales.
Es cierto que esta joyería no ostentaba el glamour de otras importantes joyerías de su época como El Gallo o Le Trianon, sin embargo ganó gran prestigio con su especialización en oro dental.
Y es que desde 1927, aprovechando la experiencia adquirida en metales preciosos, la empresa puso la mirada en los oros dentales. La aventura fue todo un éxito y por primera vez en Cuba, una empresa joyera lograba alcanzar estándares de calidad a la altura de lo mejor que se importaba en aquella época en materia de oro dental.
El éxito
El éxito de la empresa se logró en buena medida gracias al apoyo de los odontólogos cubanos que veían un gran interés económico en tener un proveedor confiable y de calidad dentro de Cuba, lo que permitía precios más competitivos que el del material importado.
Sin duda alguna el éxito de la empresa fue grande dentro de Cuba. La Fortuna se convierte así en precursora de la industrialización de oros dentales dentro de la Isla. La joyería fabricaba todo tipo de oros requeridos por los odontólogos cubanos.
La ampliación de su mercado la convirtió en la más grande de este giro en nuestro país. Además logró la representación de importantes firmas extranjeras como Universal Dental Co, The SS White Dental Manufacturing Co y The L. D. Caulk Co, así como otras no menos relevantes.
El edificio donde se ubicó esta Joyería ya no existe desde hace varios años debido a su derrumbe.